Déu Pare, dame Gracia y pone en mí el deseo de buscarte, para que al buscarte pueda encontrarte, para que al encontrarte pueda amarte, y para que al amarte pueda odiar con todas mis fuerzas, con toda mi alma y todo mi corazón, todos los pecados de los que me has salvado...
En el Nombre de Jesús, amén!



domingo, 9 de octubre de 2011

De Diferentes Usos del Espejo...


7 ¿Qué diremos, pues? ¿La ley es pecado? En ninguna manera. Pero yo no conocí el pecado sino por la ley; porque tampoco conociera la codicia, si la ley no dijera: No codiciarás.
Romanos 7:7
Tanto los legalistas como los cristianos creemos que la Ley es un espejo, pero mientras que los primeros la utilizan para admirarse a ellos mismos, los segundos para ver cómo somos en realidad.